viernes, 20 de julio de 2012

EL CABALLERO DE LA TRISTE FIGURA (20/07/2012)


Se le tuvo que pasar por la cabeza, forzosamente. Sobre la tribuna del Congreso, a punto de recitar la lista maldita con las medidas de ajuste más duras de la historia de la democracia, Mariano Rajoy tuvo que revivir ese momento, como el flashback de una película que protagonizó solo unos meses atrás. Él era el flamante jefe de la oposición y el primer escaño azul lo ocupaba un presidente de rostro descolorido, superado por una situación económica que entonces se antojaba dramática... ¡Qué sabíamos entonces de dramatismo! Antes de anunciar los recortes que iban a cabrear a medio país y a atemorizar al otro medio, el ahora presidente Rajoy quizás musitó entre dientes: “Somos dueños de nuestros silencios y esclavos de nuestras palabras”. Y debió recordar las que pronunció en esa misma tribuna cuando el gobierno de Zapatero subió el IVA, empujado por las angustias financieras que no han dejado de crecer desde entonces: “Un disparate, un sablazo de mal gobernante, inútil, injusto...” Creo que, a estas alturas, casi nadie discute que el gobierno socialista gestionó la crisis con extraordinaria torpeza pero, siendo justos, habría que dejar también sentado que la oposición del Partido Popular fue devastadora, desleal y poco patriótica. ¿Sabrán los partidos políticos extraer alguna enseñanza de toda esta zozobra? El espectáculo de la diputada/hija de papá Andrea Fabra jaleando a su jefe cuando anunciaba el recorte a los parados – “¡Muy bien, muy bien!” – y rematándolo con un muy poco enigmático “¡Que se jodan!”, me ha sumido en la vergüenza y la indignación. Sospecho que al mismo Rajoy también. ¡Qué tragedia es que la sensatez nos venga cuando ya pasó el tiempo de poder emplearla! Rajoy sería hoy un magnífico jefe de la oposición, pero los dioses le han reservado un destino más cruel: ser el caballero de la triste figura.

No hay comentarios:

Publicar un comentario