sábado, 26 de octubre de 2013

ALEMANES SILENCIOSOS (25/10/2013)

Sin hacer ruido, los dos grandes partidos políticos alemanes, el democristiano y el socialdemócrata, siguen negociando para alcanzar un pacto de gobierno. Comprendo que la noticia, dicha así, no vaya a ser trending topic en las redes sociales. Tampoco se prevén acalorados debates en las tertulias radiofónicas. En España estamos demasiado ocupados en asuntos identitarios, separatismos, sectarismos, asesinos que salen de la cárcel y corruptos que no entran, como para prestar atención a un tema tan... ¿aburrido? ¿O debería decir revolucionario? Volvamos al principio, para tomar conciencia de su significado. La CDU, el partido de Angela Merkel, y los socialdemócratas del SPD, son los equivalentes al PP y al PSOE en España. La gran coalición que están negociando significa, ni más ni menos, que el futuro gobierno alemán estará compuesto por ministros de los dos grandes partidos. ¿Se imaginan un gobierno de España con Rubalcaba sentado en la mesa del consejo de ministros junto a una bronceada Ana Mato? Ni un cataclismo nuclear lograría un prodigio semejante. Para los alemanes, sin embargo, no será la primera vez: en 1969 y 2005 ya tuvieron gobiernos de coalición entre las dos fuerzas políticas teóricamente antagónicas. ¿Por qué se habla tan poco en España de un acontecimiento tan revolucionario? Porque, más o menos conscientemente, no interesa al establishment ni a los creadores de opinión. ¿En qué ocuparía su tiempo un político español medio si no pudiera criticar a sus rivales? ¿En tener ideas? ¿Y qué sería del periodismo patrio si ya no se pudiera identificar claramente a amigos y enemigos? Sería la ruina de las dos mayores industrias del país, el alboroto y el sectarismo. Mientras tanto, los alemanes siguen a lo suyo. Un 66% de la población apoya la gran coalición. Casi sin hacer ruido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario